domingo, 18 de octubre de 2009

La NASA impacta en la Luna en busca de agua.

En 1969 el hombre llegaba por primera vez a la Luna. Treinta años después, un equipo de la NASA con un pequeño presupuesto pretende dar otro gran paso en la historia de la humanidad: encontrar agua en su superficie.

El pasado 9 de octubre a las 4.30 am, hora americana, un primer cohete chocaba contra la Luna y cuatro minutos más tarde, un segundo impacto de la nave LCROSS culminaba con éxito la misión de recoger todos los datos posibles para detectar la presencia de agua en nuestro satélite.

Todo comenzó con la aprobación de la misión LCROSS (en inglés) en 2006 y el 20 de junio de este año,un equipo de la NASA lanzaba al espacio el cohete LCROSS, adosado a la nave Centaur y junto con la nave espacial LRO, Orbitador de Reconocimiento Lunar (en inglés). Una hora después del lanzamiento, la nave LRO se separaba y la nave Centaur orbitaba La Tierra varias veces durante 113 días antes de separarse del LCROSS y estrellarse contra la Luna. El lugar elegido es el cráter Cabeus, permanentemente en la sombra y cercano al polo sur de la Luna, donde existe una gran probabilidad de encontrar agua.

La separación de la nave Centaur y el cohete LCROSS se produjo en la madrugada del 9 de octubre. A las 4.30 de la mañana la nave Centaur se estrelló contra la Luna creando un cráter y generando una gran nube de escombros lunares y, posiblemente, vapor de agua o agua helada. Cuatro minutos después, el LCROSS siguió prácticamente la misma trayectoria y recogió gran cantidad de datos que retransmite a la Tierra antes de su desaparición.

Tras el impacto, Doug Cooke, administrador asociado de la Dirección de Sistemas de Exploración de la NASA en Washington, felicitó al equipo. “Este es un gran día para la ciencia y la exploración”.

La campaña informativa desplegada por la NASA (en inglés) días antes del desenlace llevó a numerosos aficionados a concentrarse en las inmediaciones del centro de Exploración Ames de la NASA en California. Incluso la Casa Blanca vivió su propia noche de astronomía (vídeo en inglés).

Para todo aquél que quisiera vivir en directo los últimos minutos en órbita de las naves Centaur y LCROSS, la televisión de la Agencia Espacial 24 horas retransmitió por internet una emisión especial donde se pudo ver desde el despegue y la separación de las dos naves hasta la última imagen grabada antes del segundo impacto. El despliegue informativo incluyó numerosas actividades destinadas a dar a conocer al público y a la prensa el proyecto LCROSS. Desde las 9.00 pm del jueves se puso en marcha un programa especial que contó con una preconferencia de los participantes de la misión así como con entrevistas realizadas a Charlie Duke, astronauta de Apolo 16 o S. Pete Worden, Director del Centro Amnes de la NASA, entre otros.

Tanto empeño por dar a conocer este evento, que incluso cuenta con una canción compuesta para la ocasión (vídeo en inglés), parece tener un interés científico. Como señaló Jennifer Heldman, coordinadora de Ames de la campaña de observación LCROSS, “Uno de los objetivos iniciales de la misión era llegar a tanta gente para ver los efectos de LCROSS de todas las formas posibles. La cantidad de información corroborada que se puede sacar hace este evento único y fascinante”. Para llevar a cabo la segunda fase de la investigación, que consiste en analizar los datos obtenidos, se tendrán en cuenta incluso las imágenes y vídeos de los impactos captadas por la comunidad de astrónomos aficionados.

YouTube. LCROSS

La existencia de agua en la Luna supondría un gran avance en la investigación de nuestro cuerpo celeste más cercano. Una investigación que comenzó en 1993 con la misión Clementine, que descubrió posibles evidencias de agua en el polo sur del satélite. Aunque impacto del LCROSS ha sido un rotundo éxito, aún queda una dura tarea de análisis e investigación de los datos obtenidos antes de la confirmación de la existencia de agua en la Luna.

No hay comentarios:

Publicar un comentario